La Fábrica

Todo tiene un origen. Un lugar en el que las cosas pasan de ser ideas y sueños, a convertirse en realidad.

En nuestro caso, ese lugar es una fábrica de alta eficiencia y rendimiento, en la que se combinan las últimas tecnologías (más respetuosas y eficientes) con la sabiduría de nuestro maestro cervecero.

Tenemos la flexibilidad para adaptarnos rápidamente a cambios de oferta y demanda del mercado, manteniendo siempre la calidad del producto.

Así son, a grandes rasgos, los pasos a través de los cuales se pasa de la materia prima, a disfrutar de la vida en la terracita de un bar.

Malteado

Durante el malteado, los granos de cereal atraviesan un proceso de germinación controlada con el fin de activar las enzimas presentes en el grano, que luego serán necesarias durante la maceración. Dependiendo del grado de tostado obtenido durante el malteo, conseguimos maltas más claras u oscuras que aportarán el color de la cerveza.

Molienda y maceración

Una vez molido el grano, lo mezclamos con agua para preparar el mosto cervecero. Para el proceso de macerado, la malta se mezcla con el agua a diferentes tiempos y temperaturas, produciendo las transformaciones necesarias para convertir el almidón en azucares fermentables y no fermentables que aportaran alcohol y cuerpo a la cerveza.

Filtración

Tras la maceración, se separa el mosto líquido de los restos de malta. Para ello filtramos el mosto, separando el líquido del sólido, a este último le llamamos bagazo y se reaprovecha para la alimentación animal.

Cocción

La cocina de nuestro maestro cervecero, Boris de Mesones. Donde se ponen en marcha las recetas combinando los ingredientes de mejor calidad. Añadimos lúpulo al mosto y se lleva a ebullición con el objetivo de aportar amargor y aroma presentes en el lúpulo, esterilizando el mosto y evaporando aromas indeseables.

Fermentación

Donde sucede la magia, gracias a la labor de la levadura el mosto se transforma en cerveza. Aquí se transforman los azúcares fermentables en alcohol y CO², al tiempo que se generan una gran variedad de compuestos que den el aroma a la cerveza.

Bodega

Cuando la levadura ha hecho su trabajo transformando el mosto en cerveza, dejamos enfriar este líquido para madurar la cerveza. Aquí se clarifica, atenúa y afina el aroma.

Embarrilado

Contamos con un proceso de embarrilado dirigido por ágiles brazos mecánicos y modernas cintas para transportar nuestros barriles.

Y aquí, finalmente, llega la parte más importante para todos a los que les gusta la cerveza.

Tirar, servir
y disfrutar

Visitas guiadas

No necesitáis tener una etiqueta dorada para entrar a nuestra fábrica. Basta con que os pongáis en contacto con nosotros para poder disfrutar de un paseo por el pasado y el futuro, descubriendo cómo algo tan intangible como disfrutar de la vida, se transforma en nuestro preciado líquido para que luego, tú y los tuyos, podáis disfrutar de cualquiera de nuestras cervezas en la terraza de un bar.

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